¿Qué es la realidad? Fácil pregunta de difícil respuesta, ¿verdad?
Supongamos que la realidad es la percepción del entorno que nos rodea, todo aquello que tocamos, olemos, sentimos e incluso vemos.
Ahora supongamos que existe una serie de elementos que nos permiten alterar esa realidad, pero… ¿cómo es posible esto? Con la realidad virtual y la realidad aumentada.
La tecnología inventa otras realidades
A día de hoy la tecnología es la respuesta. Los sistemas informáticos dotados de unas especificaciones concretas, sumados a un conjunto de algoritmos inteligentes, son capaces de alterar y generar nuevas realidades modificando y mejorando las percepciones de una realidad que podrá ser, la realidad física (lo que podemos ver, tocar, oír, sentir) o una completamente alternativa.
Es aquí donde encontramos las dos principales vertientes de realidades inventadas por el ser humano, nos referimos a la realidad virtual y la realidad aumentada.
La realidad virtual y aumentada
Se define la realidad virtual como entorno generado mediante tecnología informática, que crea en el usuario la sensación de estar inmerso en él. Dicho entorno es contemplado por el usuario a través de un dispositivo conocido como gafas realidad virtual.
La modalidad de realidad aumentada, por su parte, permite la visión de un entorno físico del mundo real, mediante un dispositivo tecnológico pudiendo ver a través de él aspectos que la propia realidad física no contempla.
¿Qué abanico de posibilidades nos ofrecen estas realidades?
La respuesta es infinita, como lo son las teorías filosóficas sobre la realidad. A medida que pasa el tiempo las tecnologías empleadas para el desarrollo de estos mundos virtuales mejorarán, y lo harán hasta el punto de crear realidades capaces de cuestionar la que hoy consideramos como única y verdadera.
¿Te imaginas estar en el salón de tu casa pero, a la vez, jugando una final de la Champions League junto a Cristiano Ronaldo o Leo Messi en uno de los estadios de fútbol más grandes del mundo? ¿Qué tal visitar el museo de Historia Natural de Nueva York, en pleno Central Park y explorar restos fósiles de un Tiranosaurio Rex sentado en la mesa de tu cocina?
Si se tratara de un retrato fiel a la realidad, ¿quién puede decir que no sea verdad lo que estás viendo?
¿Qué dirías si sobre la carretera por la que circulas, se fuesen pintando indicaciones a tu paso para mejorar la experiencia del usuario en carretera?
Todas estas ideas, que hoy no parecen reales, lo serán en unos años. Mientras tanto, puedes saber muchas más cosas sobre estas realidades en los siguientes enlaces.