Los altos niveles de estrés, combinados con un entorno laboral exigente, son factores que contribuyen al desarrollo del burnout. Es una respuesta al estrés laboral crónico que no se ha gestionado de forma adecuada. Sigue leyendo y conoce en profundidad qué es el burnout laboral, cuáles son sus causas, cómo tratarlo y mucho más.
Al detalle: qué es el burnout laboral
El síndrome de desgaste profesional, también conocido como síndrome de estar quemado o burnout laboral, es un problema cada vez más común en el ámbito laboral.
Se caracteriza por un estado de estrés laboral crónico que lleva al agotamiento emocional, la despersonalización y una disminución en el sentido de realización personal en el trabajo. Este fenómeno puede afectar a cualquier persona, independientemente de su profesión o nivel jerárquico.
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¿Cómo se manifiesta?
Las personas que sufren burnout experimentan una serie de síntomas que afectan tanto su salud física como mental. Se conoce como las 3 dimensiones clave de este síndrome y las hemos mencionado brevemente:
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- Agotamiento emocional: Se manifiesta como una sensación de debilitamiento extremo, falta de energía y recursos para afrontar las exigencias del trabajo. El trabajador siente que se ha quedado sin combustible, sin capacidad para seguir adelante.
- Despersonalización: Se caracteriza por una actitud negativa y distante hacia el trabajo y las personas con las que se interactúa. El trabajador se vuelve cínico, insensible y desinteresado en sus tareas.
- Baja realización personal: Se experimenta una sensación de ineficacia y fracaso, con baja autoestima y una percepción negativa de los logros y competencias propias. El trabajador siente que no está haciendo un buen trabajo y que no está a la altura de las expectativas.
Además de estos síntomas claros y centrales, también se puede manifestar a través de altos niveles de estrés (ansiedad, irritabilidad, dificultad para concentrarse, problemas de sueño…); con comportamientos negativos (actitud cínica o negativa hacia el trabajo, aislamiento social, absentismo laboral…); mediante problemas de salud física (dolores de cabeza, problemas digestivos, fatiga crónica, etc.)
¿Sabías que en 2019 la OMS (Organización Mundial de la Salud) incluyó el burnout en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) como un problema de salud mental relacionado con el trabajo?
¿Quiénes son más propensos a sufrirlo?
Aunque cualquier persona puede sufrir burnout laboral, hay ciertos factores que aumentan el riesgo, como:
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- Personas con expectativas poco realistas: Principalmente aquellas que buscan la perfección o se exigen demasiado a sí mismas.
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- Personas conformistas e inseguras: Aquellas que tienen dificultades para decir no, establecer límites o para defender sus derechos.
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- Personas que trabajan en entornos de alta presión: Como profesionales de la salud, docentes o personal de atención al cliente, entre otros.
Causas del burnout
Aunque el síndrome de estar quemado es resultado de una combinación de factores o causas, podemos encontrar algunas claras como:
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- Exceso de trabajo: Al contar con una carga de trabajo excesiva, falta de tiempo para descansar o plazos ajustados.
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- Falta de control: Es el sentimiento de no tener control sobre el trabajo o sobre las decisiones que se toman, generando mucho estrés y ansiedad a quien lo sufre.
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- Falta de apoyo social: Especialmente por parte de los compañeros de trabajo o de los superiores, pues se supone que deben ser personas de referencia y de apoyo en el día a día.
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- Falta de reconocimiento: Es el sentimiento de que el trabajo no es valorado o reconocido, derivando es enormes frustraciones.
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- Ambiente de trabajo negativo: Debido a conflictos con compañeros, acoso laboral o falta de comunicación, entre otras cuestiones.
Consecuencias de este síndrome
Como podrás imaginar, las consecuencias son fatales tanto para las personas que lo sufren como para las empresas.
Encontramos dolencias físicas, como dolor de cabeza o de sueño, psicológicas, como irritabilidad, y sociales, como aislamiento o problemas de pareja.
Al mismo tiempo, se observa una disminución de la productividad, un mayor absentismo laboral (principalmente por enfermedad) y rotación del personal al verse obligados a cambiar de trabajo con los costes que eso genera para la empresa.
Cómo prevenir el burnout laboral: toma nota de estos consejos
Para los trabajadores
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- Mantener una conducta asertiva: Aprender a decir no, delegar tareas y expresar tus necesidades sin miedo a lo que puedan decir u opinar.
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- Desarrollar habilidades para manejar el estrés: Como por ejemplo técnicas de relajación, ejercicio físico, alimentación saludable o sueño adecuado.
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- Tener una vida social fuera del trabajo: Es perfecto para dedicar tiempo a la familia, a los amigos y a esos hobbies que siempre te han gustado.
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- Buscar ayuda profesional: Si sientes que está empezando a sufrir burnout, es importante buscar la ayuda de un psicólogo o terapeuta.
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- Toma descansos regulares: No trabajes durante horas seguidas sin tomar descansos para comer, beber y relajarte, es importante cuidar tu mente.
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Para las empresas
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- Implementar políticas de prevención de riesgos laborales: Evaluar los riesgos psicosociales en el trabajo y tomar medidas para reducirlos es clave, especialmente para el departamento de Recursos Humanos.
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- Promover una cultura de trabajo saludable: Fomentando la comunicación, el trabajo en equipo y la flexibilidad, por ejemplo.
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- Ofrecer formación a los trabajadores: Enséñales a gestionar el estrés y a desarrollar habilidades de afrontamiento.
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- Reconocer y premiar el buen trabajo: Motivar a los trabajadores con un feedback positivo y recompensas por su esfuerzo.