Desde el año 2011, cada 22 de febrero tiene lugar el Día Europeo de la Igualdad Salarial, como símbolo combativo por parte de la Unión Europea. En este caso, su misión es ofrecer visibilidad a la diferencia salarial que aún existe entre hombres y mujeres.
En tugesto, queremos dedicar nuestro post de blog a ofrecer una visión global acerca de la situación actual en cuanto a qué es la brecha salarial de género, destacando qué es la brecha salarial, qué causas la provocan y de qué forma se puede reducir.
¿Qué es la brecha salarial?
Cuando hablamos de brecha salarial, nos referimos a la diferencia entre la mediana de los ingresos de hombres y mujeres en relación con la mediana de ingresos que tienen los hombres.
En el año 2020, el Sindicatos de Técnicos de Hacienda (Gestha), reveló a través de un informe que había una brecha que alcanzaba los 4.915 euros entre hombres y mujeres, que en porcentaje se traduce en un 28,6%.
Por otro lado, Igualdad situó la brecha salarial de género en 2020 en el mercado laboral en un 18,72%, reduciéndose hasta 5,21 puntos en los ocho años anteriores. El salario medio de las mujeres era de 22.467 euros al año, mientras que en los varones se incrementó hasta en 27.642 euros.
Se prevé que las modificaciones derivadas de la reforma laboral, así como la subida del SMI, hagan efectiva la reducción de las reducciones salariales entre mujeres y hombres. Y no solo ello, sino que los cambios normativos en planes de igualdad de género, la transparencia retributiva y la reducción de la temporalidad, contribuirán también a conseguirlo.
El informe al que hacíamos referencia, remarca que la brecha fue mayor entre trabajadores a tiempo parcial, con un 12,08% frente al 8,2% de trabajadores a tiempo completo.
Asimismo, se incrementa a medida que se eleva la edad, concretamente para mayores de 65 años, donde la brecha llegó a un 31,71%.
Centrándonos en la brecha retributiva, resultó inferior en el sector público con un 10,3%, que en el privado con un 16,2%. Los hombres ganaron más que las mujeres en prácticamente la totalidad de secciones de actividad. Llama la atención la diferencia abismal que hubo en actividades administrativas, así como servicios auxiliares, donde se alcanzó la cifra el 31,07%.
Las actividades sanitarias y servicios sociales tuvieron una brecha del 28,39% y es sorprendente en un sector en el que las mujeres representan hasta un 76,44% del total de los empleados.
¿Cuáles son las causas que dan pie a la diferencia salarial entre hombres y mujeres?
Tomando como referencia los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), encontramos cómo una de las causas que más llama la atención y que más abunda es el número de contratos temporales en función del género.
En el caso de las mujeres, tienen un mayor número de contratos de este tipo, por lo que los salarios siempre son menores y con una cotización inferior a la Seguridad Social.
Otra de las causas se centra en el público joven. Debido a su temprana edad para embarcarse al mundo laboral, los sueldos que consiguen son más bajos, lo que contribuye también a la desigualdad.
Como última causa, encontramos la formación. Si bien es cierto que, por fortuna, las mujeres acceden cada vez más a estudios superiores e incluso, la proporción está rebasando a la de los hombres.
A pesar de ello, hasta hace muy pocos años la realidad era completamente al revés, donde la desigualdad en educación y oportunidades era mayor.
¿De qué forma se puede reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres?
En 2023, todavía hay puestos de trabajo que limitan el acceso a las mujeres. Por increíble que parezca es una realidad, pero también es cierto que a medida que avanzamos, encontramos un mayor número de leyes y normativas que promueven la supresión de comentarios sexistas a la hora de acceder a ofertas de trabajo.
Otro aspecto que se debe mencionar es la conciliación laboral. Una gran cantidad de mujeres solo pueden tener acceso a contratos de tiempo parcial para hacer efectiva la conciliación laboral con su vida personal.
Igualmente, otras muchas cesan su carrera laboral por dedicarse por entero al cuidado de sus hijos.
Evidentemente, se requiere de un cambio de concepción por parte de la sociedad y los organismos, para concebir la crianza equitativa en todo momento.
Así, establecer medidas como la igualdad de remuneración por género, permisos de maternidad y paternidad, teletrabajo, jornadas intensivas siempre que sea posible o ayudas, son muy importantes.
En tugesto, para fomentar la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, contamos con nuestro plan de igualdad. Un conjunto de medidas que persigue este objetivo tanto en el trato como en las oportunidades en el ámbito laboral.
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